27.7.14

Paco Gusana, de una cueva a un furgón

F.F.C.
Gusana junto a nuestro mundólogo
Francisco Fornas Cortés es un hombre maravilloso, quizás un tanto raro, pero ineludiblemente fiel a sus principios, vivirá y morirá libre. Cualquier hombre en la vida puede tener dinero, trabajo o una familia, pero no encontrar la felicidad como la ha encontrado nuestro amigo, Paco Gusana. Este vecino de Caudiel, lo es por imperativo legal, ya que fue despojado de su gran vivienda, una cueva enclavada en una montaña de Viver, propiedad de la Iglesia, donde había nacido y crecido durante su longeva vida, pues acaba de cumplir 80 años de edad.

Fco. Fornas Cortés
Gusana vive a dia de hoy sin la caridad de la Iglesia, sin sus privilegios, sin sus oros y sin algunas de sus hipocresias, dejó una cueva para irse a un furgón, sito en el municipio de Caudiel, donde da de comer a caballos y conejos propiedad de un acaudalado letrado, cuida sus tomates y hortalizas y lo principal,  echó a la basura sus doce pastillas recomendadas por su médico, pues ha llegado a una conclusión que la civilización no es de su mundo. No bebe alcohol, no fuma, se siente como Tarzán, el rey de la selva, la gente puede pensar que estoy loco, afirma Gusana, me han dado casas, viviendas y pisos, los he rechazado todo, mi vida está en el campo, que es para lo que nací, nos cuenta emocionado.


Entrevistador e entrevistado
Los lugareños de Jérica, todos conocen a este "solitario", todos lo saludan, esta noche hay toro embolado y Gusana no se lo perderá, unos quieren hacerse una foto con él, otros le sonríen y el camarero bromea con él. No tiene nada que envidiar a nadie, ni tan siquiera a la Iglesia, que más da, enfatiza, sigo libre aunque haya pasado de una cueva a un furgón, exclama orgulloso nuestro entrépido personaje.

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