NOTA DE PRENSA DE LA COMUNIÓN TRADICIONALISTA CARLISTA DEL REINO DE VALENCIA.

Resulta inconcebible el ataque continuado que, desde todos los ámbitos de la política, sufren las tradiciones en nuestro país. La tradición no es algo malo. Al contrario, es la materialización del modo de vida que durante siglos forjaron nuestros antepasados y que ha llegado (a pesar del intento de muchos políticos actuales), hasta nuestros días.

Cuando han podido, han borrado muchas tradiciones de la vida pública sin mayor reparo. Cuando no han podido eliminarlas, por la resistencia popular a perder sus raíces, han modificado las leyes que han sido necesarias, para efectuar esta transmutación “por exigencia legal”. Y, cuando a pesar de todos estos esfuerzos, esas tradiciones se han resistido a su desaparición, han empezado a crear nuevas ideas que, de una manera subliminal, sólo buscan hacer desaparecer lo poco que queda de la España tradicional.

Uno de los casos más sangrantes se está dando con lo referente a la Navidad. En Navidad, guste o no, quieran o no, se celebra la Natividad de Jesucristo, y los hechos acontecidos hace 2000 años. Es por esto que a muchos alcaldes, que ven en estas fiestas una ofensa a su “poder terrenal” se empeñan en intentar borrar el verdadero espíritu de la Navidad para sustituirlo por otro tipo de fiestas. Algunos ejemplos los tenemos en la sustitución de la denominación “Navidad” por “Fiestas de Invierno” o “Solstic

En el caso del Reino de Valencia, el ataque más sonado a este sentimiento, viene por la imposición por parte del Alcalde de tres reinas magas que quiere implantar a cualquier costa, a pesar de la nula participación popular en sus apariciones. Con la escusa que la organización de los actos de estas reinas magas lo realiza una entidad de la sociedad civil, dice que no va a oponerse a la manifestación popular. Eso no es óbice para que las reciba en el Ayuntamiento y las haga asomarse al balcón, lugar destinado para los grandes acontecimientos de la ciudad. No creemos que este sea el tratamiento adecuado para estas tres personas.

Por lo tanto desde la Comunión Tradicionalista Carlista del Reino de Valencia queremos denunciar el uso sectario, y en contra del sentir mayoritario del pueblo valenciano, de los gastos que suponen al erario público la organización de este acto, así como la utilización de espacios públicos tan destacados como el balcón principal del Ayuntamiento para menesteres de dudosa importancia y carácter partidista. Por lo tanto, y durante todas las fiestas de Navidad, llevaremos a cabo una campaña de propaganda con el lema: “Volem REIS ORIENTALS, NO BRUIXES MUNICIPALS”.

Comunicación CTC Carlistas Valencia