1.1.10

Segorbe festeja una nochevieja de las más tranquilas de la década

La fuerte crisis económica se inmiscuye en la celebración de la nochevieja segorbina causando una afluencia de personas mínima en las calles, sólo atribuible a la situación de crisis económica que sufre especialmente el Alto Palancia. Otros factores pudieran haber sido el fuerte viento y frío que hacía inapetecible salir a la calle, por otro lado también incidió cambios de hábito que obligaron al personal a quedarse en casa o en lugares preparados para cenar en cuadrillas, prefiriendo organizarse ellos la cena, antes que pagar 200 o 250 €uros por pareja. La falta de ambiente en la glorieta y la desaparición de los "auto de choque" le quitaron entusiasmo y calidez a la noche más antigua del año.

En esta época que comenzamos se esperan nuevos cambios en los hábitos de los jóvenes a la hora de decidir donde pasar la noche de fin de año así como variarán las costumbres y desplazamientos de un lugar a otro, ante la implacable así como autoritaria norma de prohibir simplemente beber una caña de cerveza, a quienes conduzcan obviamente.

Como efectos colaterales también sufrirán recaídas las tiendas de ropa, pues la elección de un vestuario lujoso vendrá determinada por el lugar social donde se reúnan para dar por finalizado al año, que en ningún caso volverán a ser las salas de fiestas, pues estas sólo estarán reservadas para familias pudientes y con trabajo, algo que con "el corralito" que viene, sólo será para una privilegiada minoría social y selecta.

Nosotros, desde El Informal Segorbino, felicitar a estos valientes jóvenes que desafiaron la crisis económica, visitando las zonas de ocio segorbinas, que por cierto fueron bien pocas, tan sólo dos bares nocturnos y una discoteca, El Edén.

Redacción/El Informal Segorbino

9 comentarios :

Anónimo dijo...

Me sorprende la ligereza con que se trata en este artículo la conveniencia de beber en nochevieja. Las normas están para cumplirlas, si las personas fuésemos más responsables no haría falta recordar a todas horas que no se puede beber y conducir. Es del todo irresponsable como el señor que redacta este artículo anima a beber a los jóvenes. De verguenza.

Redacción dijo...

Le preguntaré si Vd. ¿está a favor del consumo de drogas blandas o duras para uso privado evidentemente? A partir de aquí seguiremos charlando, gracias. El redactor de la noticia.

Anónimo dijo...

Por supuesto quer NO estoy a favor de las drogas en ningún caso. Ni hago distinción alguna entre "blandas o duras" ya que todas son perjudiciales para la salud. Sigo manteniendo que es usted un irresponsable al asociar ocio y diversión con bebida y relativizando la labor que hacen los agentes para reducir la siniestralidad en las carreteras. El consumo irresponsable mata señor redactor del artículo. De verguenza también su respuesta a mi anterior comentario.

Redacción dijo...

Mire Vd. relájese y muestre actitudes más democráticas y cívicas, la normativa pudiera incluso llamarse "fascista" de prohibir tomarse un par de cervezas viene incluida en el totalitarismo que año tras año viene ejerciendose sobre la ley de trafico, que casualmente afecta más a las clases más débiles que a las clases burguesas.

Vd. es de los que prohibirían el alcohol en las cervezas, el recrearse en nochevieja, las faltas en el fútbol, o los piropos a las señoritas. Más bien a Vd. lo encallaría en los tiempos de la Inquisisción, en la época de Franco y en el conservadurismo más duro de este pais.

Con esto termino y le encomiendo a leerse las diversas disposiciones en que se ha ido agravando la penalidad en torno a los grados de alcohol en el cuerpo, yo simplemente estoy a favor de que no se endurezca año tras año y entiendo que un 0,8 pudiera estar perfectamente permitido.

Repito relajése, que tan sólo son opiniones y reflexiones, no haga de un artículo un problema de estado, estamos en el 2010, sea Vd. un poco más tolerante, pacificador y amigo de todas las civilizaciones, que vivimos en sociedad. Gracias.

Fdo: El redactor de arriba.

Anónimo dijo...

Usted trata de cuestionar si mi actitud es democrática? Acabáramos viniendo de quien me interpela. Será posible. Ah que sepa que soy muy joven y sé perfectamente en el año que me encuentro, lo único que ocurre es que mantengo otra actitud hacia la bebida y hacia el consumo de ciertas sustancias que usted por lo visto no considera perjudiciales.

Pachuli dijo...

Desde hace mas de 2000 años, la Península Ibérica ha sido y es productora y consumidora de bebidas destiladas y/o fermentadas. Genéticamente estamos preparados para asimilar cantidades moderadas de alcohol, no sucede lo mismo con pueblos como los aborígenes australianos, quienes genéticamente son vulnerables. Así que “señor muy joven”, si a usted no le gusta beber, deacuerdo, hace muy bien, y no se ofenda pero es estupido calificar de iguales cerveza, vino o pacharan con cocaina, extasis etc… La historia ya lo ha demostrado.

Un defensor del consumo responsable.

Anónimo dijo...

Vivir en sociedad es acatar normas, normas que emanan del estado que hemos legitimado a través de nuestro voto. Es del todo irresponsable que siga cuestionando la labor que realizan desde las instancias competentes para limitar el consumo de las sustancias que se demuestran perjudiciales para la salud. Usted quien es para cuestionar los límites que se ponen desde instancias oficiales a ese consumo? Es usted médico? En fin, éste es un diálogo de sordos. Una cosa más, debería ser más prudente en sus "reflexiones" en torno a la bebida, hay mucho alcohólico por ahí que también se creía "responsable".

pachuli dijo...

Es lamentable beber hasta embriagarte pero ¿acaso es condenable beberse una copa de vino?. No encontrara a ningun medico que lo considere perjudicial en personas sanas. Menuda sociedad de mierda que se empeña en buscar la paja en el ojo ajeno.

Anónimo dijo...

Sea más educado en sus comentarios. Cuando no quedan argumentos se recurren a las palabras soeces como las que usted utiliza en la respuesta. Nadie ha condenado beber una copa de vino, lo que es condenable e irresponsable es cuestionar los límites impuestos al consumo de alcohol alentando a los jóvenes a beber tal como usted redacta en su artículo.