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| Artículo opinión Manuel Martín |
Es por todos conocido que Puerto Rico fue Colonia Española, concretamente durante cuatro siglos hasta que, esta hermosa isla, junto con Cuba, Filipinas y la Isla de Guam, en el Pacífico, fueron cedidas a Estados Unidos, en 1.898, mediante el Tratado de París, después de perder España, la breve guerra que disputamos con EE.UU.
En el año 1.897, Puerto Rico era Provincia Española. En estos momentos, Puerto Rico se considera Estado Libre Asociado de los Estados Unidos pero, como territorio no incorporado, sin autonomía política ni, tampoco, derechos de ciudadanía estadounidense.
En la práctica, después de 116 años, la realidad es que Puerto Rico, sigue siendo una pseudocolonia Norteamericana. EE.UU. no admite a Puerto Rico como un Estado más, ni le concede Autonomía, por eso, no es de extrañar que haya surgido un colectivo, el M.R.E (Movimiento de Reunificación con España) que aspira a que Puerto Rico, se convierta en la 18 Comunidad Autónoma Española. José Nieves, descendiente de Canarios y Catalanes, es el líder del M.R.E y, como él dice “somos españoles, queremos volver a casa y dejar de ser una colonia norteamericana.
Curiosidades de la historia, la vida y la política, con Cataluña está ocurriendo, al mismo tiempo, todo lo contrario. En el mismo periodo en el que los partidos independentistas catalanes están en auge, en Puerto Rico se plantean regresar a “La Madre Patria”. Bien es cierto que este colectivo es, de momento minoritario pero, atención, el 52 % de la población rechaza el actual modelo de Estado, un dato muy significativo al que no hay que restarle valor.
A nivel personal, no cambio Cataluña por Puerto Rico, no, desde luego que no pero, hay que reconocer que, una hipotética incorporación de Puerto Rico a España, tendría notables consecuencias a nivel económico, social y político.
España se convertiría en la principal puerta de acceso de Europa a todo el Continente Americano, tanto del Norte, como del Sur.
Aumentaría de manera exponencial, nuestro peso e influencia en la América Latina, sin ningún tipo de duda; nuestra posición internacional sería muy superior. Conseguiríamos una plataforma de valor incalculable para nuestras mejores empresas, cuya posibilidad de crecimiento sería infinitamente mayor, al tiempo que lograríamos una vía de captación de turismo e inversiones de un potencial incalculable.
José Nieves, se tronchaba de la risa, cuando escuchó a Arthur Mas pedir que Cataluña pudiera
ser un Estado Libre Asociado de España, sencillamente afirmó “Este hombre no sabe lo que se dice”. No lo estaremos haciendo tan mal cuando Puerto Rico desea nuestro Estado de las Autonomías y es que, lo de Mas, Pujol, Junqueras y compañía, es de un capítulo digno de una mezcla de Harry Potter y el Señor de los Anillos, con robo del tesoro incluido.
El caso de GUAM es distinto y sobre todo, mucho menos conocido. Es una pequeña isla del Pacífico, cerca de Filipinas, al igual que ésta, también fue Española. En estos momentos es uno de los 17 territorios bajo supervisión del Comité de Descolonización de las Naciones Unidas. Es propiedad de EE.UU. y en la práctica una zona militar con base de submarinos incluida, a la que, por cierto, no hace mucho el Dictador Comunista de Corea del Norte, KIM JONG-UN, amenazó con bombardear.
Sin entrar en nostalgias ni añoranzas, la realidad es que, hoy por hoy, Puerto Rico y Guam son propiedad de Estados Unidos aunque, quien sabe si, con el tiempo, podremos recuperar algo de lo perdido. El M.R.E. ahí está y sigue creciendo, mientras en España y pese a la insistencia de los Independentistas Catalanes, sólo el Gobierno de Mariano Rajoy garantiza la Unidad de España, con o sin Puerto Rico, y la inviolabilidad de la soberanía nacional; sin aspavientos pero, con firmeza.Los alborotos, las algaradas y charlotadas, las dejamos para otros. Nosotros a trabajar diariamente para vencer a la crisis y conseguir una España más fuerte, sólida y próspera.
Manuel Martín Sánchez
Diputado Autonómico Partido Popular
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