25.3.16

Su espíritu libre es hoy más necesario que nunca

Johan Cruyff tenía carácter, criterio, genio, sentido del humor y pasión: era libre y alegre en un club con personalidad. No se mordía la lengua y decía lo que pensaba. El nacionalismo siempre codició su apoyo, pero él, cuanto más lo conocía, más lo rechazaba, y no quiso saber nada se su radicalismo. En el Barça de hoy, enanizado, aborregado y sometido a los políticos –Núñez siempre se resistió a politizar el club y por eso está pagándolo-, la libertad de Cruyff ya no cabía.

 Cuando el verano pasado se pitó al Himno y al Rey en el Nou Camp ante las risas de Artur Mas, el holandés no se anduvo por las ramas:

 “Pitar el himno lo veo una desgracia total y una falta de respeto. A uno que pita el himno le falta un tornillo”.

Adéu Johan Cruyff, genial, valent, assenyat. Una finestra per on sempre entrava aire fresc.

Descansa en pau.

No hay comentarios :