La nueva alcaldesa encontró 700.000 euros en obligaciones de pago pendientes desde 2007 y las cuentas sólo ascienden a 1,5 millones
El 11 de junio, Maria Teresa Gozalvo juró su cargo como alcaldesa de Castellnovo. El PP ganó las elecciones después de 20 años de dominio socialista y comenzaba una era tras unos últimos meses un tanto convulsos con Jorge Picó al frente del consistorio. La nueva primera edil dedico los primeros días a analizar la situación heredada del anterior ejecutivo y en uno de los cajones que abrió se encontró con una sorpresa un tanto desagradable: facturas pendientes de pago por valor de 700.000 euros.
Para valorar la magnitud de estas cifras sólo hace falta compararla con el presupuesto que maneja esta localidad. La previsión de gastos e ingresos de Castellovo es de 1,5 millones de euros, lo que supone que el hipotético pago de las facturas pendientes absorbería la mitad de los gastos a los que habitualmente tiene que hacer frente el equipo de gobierno de la población del Alto Palancia.
Como es lógico, "no podemos destinar la mitad de nuestro presupuesto a pagar facturas pendientes porque lo fundamental es hacer frente a las nóminas de los funcionarios y otros gastos corrientes ineludibles", según explica la alcaldesa. Pero lo cierto es que el consistorio va a tener que comenzar a realizar algunos esfuerzos.
Sobre las facturas pendientes, la alcaldesa revela que "prácticamente la mitad corresponden a empresas de la comarca". Gozalvo admite que "por culpa de la mala gestión del equipo de gobierno anterior nos tenemos que enfrentar a algo muy duro, que es que empresarios de nuestra comarca estén esperando aún que le paguemos 2.000 euros o 3.000 euros de trabajos que han hecho pero que no les hemos pagado".
MENOS ILUMINACIÓN
Sobre las medidas que el consistorio va a tomar sobresale una por encima de las demás. Y es que el Ayuntamiento ha decidido que va apagar una de cada tres farolas de las que están instaladas en el municipio. No se ha calculado el ahorro que ello supondrá, pero se trata de una medida experimental, precisamente, para descubrir cuánto dinero se podría ahorrar.
Otra de las medidas será aplazar un año las ayudas que se conceden a las asociaciones. Esta medida no ha caído muy bien entre los colectivos locales, aunque la alcaldesa ya se ha reunido con ellos para explicarles los motivos de su decisión.
El Ayuntamiento ha suprimido también la iluminación de los edificio públicos y la ermita sólo se iluminará los sábado.
¿Y que va a ocurrir con las facturas pendientes de pago? El equipo de gobierno que dirige María Teresa Gozalvo ha aprobado también la solicitud de una línea de créditos ICO que servirá "para pagar las facturas más antiguas". A partir de ahí, "lo que vamos a hacer es establecer un plan de pagos que deberá ser compatible con los gastos que preveamos en el presupuesto de 2012". Respectivamente a las cuentas, la alcadesa recalcó que "prácticamente se van a limitar al pago de nóminas y de gastos corrientes, porque va a ser casi imposible que hagamos ninguna obra".
El 11 de junio, Maria Teresa Gozalvo juró su cargo como alcaldesa de Castellnovo. El PP ganó las elecciones después de 20 años de dominio socialista y comenzaba una era tras unos últimos meses un tanto convulsos con Jorge Picó al frente del consistorio. La nueva primera edil dedico los primeros días a analizar la situación heredada del anterior ejecutivo y en uno de los cajones que abrió se encontró con una sorpresa un tanto desagradable: facturas pendientes de pago por valor de 700.000 euros.
Para valorar la magnitud de estas cifras sólo hace falta compararla con el presupuesto que maneja esta localidad. La previsión de gastos e ingresos de Castellovo es de 1,5 millones de euros, lo que supone que el hipotético pago de las facturas pendientes absorbería la mitad de los gastos a los que habitualmente tiene que hacer frente el equipo de gobierno de la población del Alto Palancia.
Como es lógico, "no podemos destinar la mitad de nuestro presupuesto a pagar facturas pendientes porque lo fundamental es hacer frente a las nóminas de los funcionarios y otros gastos corrientes ineludibles", según explica la alcaldesa. Pero lo cierto es que el consistorio va a tener que comenzar a realizar algunos esfuerzos.
Sobre las facturas pendientes, la alcaldesa revela que "prácticamente la mitad corresponden a empresas de la comarca". Gozalvo admite que "por culpa de la mala gestión del equipo de gobierno anterior nos tenemos que enfrentar a algo muy duro, que es que empresarios de nuestra comarca estén esperando aún que le paguemos 2.000 euros o 3.000 euros de trabajos que han hecho pero que no les hemos pagado".
MENOS ILUMINACIÓN
Sobre las medidas que el consistorio va a tomar sobresale una por encima de las demás. Y es que el Ayuntamiento ha decidido que va apagar una de cada tres farolas de las que están instaladas en el municipio. No se ha calculado el ahorro que ello supondrá, pero se trata de una medida experimental, precisamente, para descubrir cuánto dinero se podría ahorrar.
Otra de las medidas será aplazar un año las ayudas que se conceden a las asociaciones. Esta medida no ha caído muy bien entre los colectivos locales, aunque la alcaldesa ya se ha reunido con ellos para explicarles los motivos de su decisión.
El Ayuntamiento ha suprimido también la iluminación de los edificio públicos y la ermita sólo se iluminará los sábado.
¿Y que va a ocurrir con las facturas pendientes de pago? El equipo de gobierno que dirige María Teresa Gozalvo ha aprobado también la solicitud de una línea de créditos ICO que servirá "para pagar las facturas más antiguas". A partir de ahí, "lo que vamos a hacer es establecer un plan de pagos que deberá ser compatible con los gastos que preveamos en el presupuesto de 2012". Respectivamente a las cuentas, la alcadesa recalcó que "prácticamente se van a limitar al pago de nóminas y de gastos corrientes, porque va a ser casi imposible que hagamos ninguna obra".
Fuente: Elmundo/Castellón al Día
No hay comentarios :
Publicar un comentario