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| Concejal Nicolás Hervás Amado |
Nicolás Hervás acusa a Rafael Calvo de filo franquista
El pasado pleno celebrado el 1 de octubre en el Ayuntamiento de Segorbe siguió el itinerario de los plenos que le han precedido. Los concejales de la oposición fuimos sometidos por un filo franquista –cosecha añeja- a la retórica imperial que se debate entre la mediocridad y la sobreactuación.
Nicolás Hervás acusa al alcalde de Segorbe de "churrullero y falto de convicciones democráticas"
El Sr. Calvo, alcalde de Segorbe, de escasas convicciones democráticas, quien a principios de los años 90, siendo concejal de la oposición, en varias ocasiones reventó el pleno, llegando al esperpento de presentarse en el mismo rodeado de su «tropa» con la boca sellada con un esparadrapo. Es este mismo churrullero, quien hoy se erige como el garante del respeto y del orden, quien ejerciendo despiadadamente el poder me echó del pleno. Lo peor de todo no es que yo fuese privado de un derecho que me otorgó la democracia a través de las urnas, lo peor ha sido que alcalde y «tropa» han hecho pública su propia versión del pleno, tan irreal como falsa.
Nicolás Hervás acusa al Partido Popular de manipular a la sociedad, superando al ministro de propaganda nazi, Joseph Goebbels.
Después de tantos años en los que los ciudadanos hemos sido sometidos al engaño sistémico del Partido Popular, no nos extraña nada, todos sabemos que en el capítulo de la manipulación son maestros y, sin duda, han superado a Goebbels.
Llamada de atención de Nicolás Hervás a su homónima Soledad Santamaría por su presunto déficit en nomenclatura y expresiones linguisticas de protocolo institucional
La anécdota del pleno fue que desde el año 2003 Dña. Soledad, en cada ocasión que hace referencia a mi persona, tanto sea en medio escrito, radio, tv o en el mismo pleno, lo hace llamándome «el Sr. Nicolás». Todos sabemos que la expresión no es la correcta. Yo a lo largo de todos estos años no he encontrado ningún momento apropiado para advertirle de su error (desde hace muchos años me ha negado el saludo) y por otra parte siempre pensé que sus correligionarios en algún momento le sugerirían que estaba equivocada. Como quiera que durante el pleno al dirigirse a mí volvió a llamarme «el Sr. Nicolás», cuando estuve en uso de la palabra y siempre en mi turno de réplica le dije que desde el año 2003 veo que está utilizando una formula incorrecta al nombrarme, que después de tantos años representando a los segorbinos y al Ayuntamiento de Segorbe, como teniente de alcaldía y en algunas ocasiones como alcaldesa en funciones, el hecho de no tener estudios no le eximía de representar a los segorbinos y al ayuntamiento con la dignidad que nos merecemos. Y que cuando uno se dirige a alguien por el nombre de pila siempre se le llama Don o si es por el apellido Señor.
Nicolás Hervás realiza curso o lección didáctica sobre términos expresivos institucionales
Llamada de atención de Nicolás Hervás a su homónima Soledad Santamaría por su presunto déficit en nomenclatura y expresiones linguisticas de protocolo institucional
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| Nota de prensa-Levante de Castellón |
La anécdota del pleno fue que desde el año 2003 Dña. Soledad, en cada ocasión que hace referencia a mi persona, tanto sea en medio escrito, radio, tv o en el mismo pleno, lo hace llamándome «el Sr. Nicolás». Todos sabemos que la expresión no es la correcta. Yo a lo largo de todos estos años no he encontrado ningún momento apropiado para advertirle de su error (desde hace muchos años me ha negado el saludo) y por otra parte siempre pensé que sus correligionarios en algún momento le sugerirían que estaba equivocada. Como quiera que durante el pleno al dirigirse a mí volvió a llamarme «el Sr. Nicolás», cuando estuve en uso de la palabra y siempre en mi turno de réplica le dije que desde el año 2003 veo que está utilizando una formula incorrecta al nombrarme, que después de tantos años representando a los segorbinos y al Ayuntamiento de Segorbe, como teniente de alcaldía y en algunas ocasiones como alcaldesa en funciones, el hecho de no tener estudios no le eximía de representar a los segorbinos y al ayuntamiento con la dignidad que nos merecemos. Y que cuando uno se dirige a alguien por el nombre de pila siempre se le llama Don o si es por el apellido Señor.
Nicolás Hervás realiza curso o lección didáctica sobre términos expresivos institucionales
Que si cuando estuviese con un conseller o con un alto cargo de la administración le llamaba Sr. Manolo o Sr. Juan se ponía en ridículo ella a la vez que nos ponía en ridículo a todos los segorbinos. Tomando la palabra Dña. Soledad y dirigiéndose a mí, me pidió perdón si me había faltado el respeto. Yo le dije que a mí me puede llamar «como le venga en gana» que a mí ni me tiene que pedir perdón ni me ha faltado el respeto. Que el respeto se lo falta así misma llamando Sr. Manolito o Sr. Pepito a un alto cargo o a un conseller. Este fue mi pecado y este el motivo formal de mi expulsión del pleno.
Nicolás Hervás niega y asegura "no" ser "machista"
Para el alcalde, el Sr. Calvo, «la falta de respeto de Hervás hacia Santamaría no fue sino un alarde de machismo y prepotencia con el que intentó menospreciar a la portavoz popular acusándola de no tener estudios», etiquetándolo como un acto de prepotencia machista. No cabe duda que el Sr. Calvo coge el rábano por las hojas, puesto que esto nada tiene que ver con las diferencias de género y sí con la educación.
Nicolás Hervás niega y asegura "no" ser "machista"
Para el alcalde, el Sr. Calvo, «la falta de respeto de Hervás hacia Santamaría no fue sino un alarde de machismo y prepotencia con el que intentó menospreciar a la portavoz popular acusándola de no tener estudios», etiquetándolo como un acto de prepotencia machista. No cabe duda que el Sr. Calvo coge el rábano por las hojas, puesto que esto nada tiene que ver con las diferencias de género y sí con la educación.
Nicolás Hervás lamenta no intervenir en la moción para pedir el retiro de placas y honores
Sr. Calvo, se necesita tener una buena dosis de perversidad y estupidez para intentar etiquetarme de «machista». Si busca machistas no hace falta que ponga su punto de mira muy lejos, hágase una introspección a su personalidad y tal vez se lleve una sorpresa. La polémica sirvió para que yo no pudiese intervenir casi nada en la moción presentada por el Grupo Socialista en relación a retirar placas y honores a personas condenadas por corrupción. Parece ser que el comienzo de mi intervención no le gustó nada al Sr. Calvo, «Está muy claro que ustedes no quieren hablar para nada de la corrupción, les pasa como al gato escaldado, que con el agua fría sale huyendo», dije. Y proseguí diciendo que «todo lo que hay hoy día en España en torno al Partido Popular son mentiras, falsas promesas y corrupción». El Sr. Calvo, viéndoselas venir, optó por expulsarme del pleno. Y esa fue la causa de mi expulsión.
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