Carta abierta a Pedro Bernat Ruiz

Queridos vecinos:

Me conocéis todos así que no hará falta que me presente.

Ya hace algunos meses que comentamos "el webmaster" de este medio y "yo" la posibilidad de incorporar una columna firmada por mí en este diario y que espero en ocasiones venideras sea más amena y menos política. El tema surgió a raíz de un intercambio de ideas y gracias a los conocimientos que, debido a mi afición, he ido adquiriendo de la historia de España y sus ilustres protagonistas. Ambos coincidimos en que sería interesante editarlos ante tanta mentira y analfabetismo histórico.

En un principio pensé inaugurar esta sección presentándome y haciendo una introducción de lo que sería la columna en sí, dando después una pequeña e interesante historia de alguna gesta española en Sudamérica o en Europa.

La verdad, cambié de opinión y he acelerado mi entrada en el diario, la cual parecía no tener fecha de inicio concreta, tras leer el artículo de mi bien querido y apreciado Pedro Bernat en el periódico “Comarca”.

Vaya por delante que soy un acérrimo defensor de la oposición al gobierno, del debate justo y abierto y de la alternancia; esencias básicas de la democracia… pero tras leer su columna, un híbrido entre la idiotez y la ciencia ficción, me he visto obligado a rebatirle todos los puntos que expone en “a dónde vamos a llegar”. Veo buena fe en su interés de mejora pero, al mismo tiempo, le veo perdido y buscando culpables cuando los verdaderos pasan ante él diariamente sin ser señalados como hace con el resto. Así, difícilmente mejorará algo por mucho que se lo proponga.

Es el primer artículo que leo de Pedro y entiendo que habrá acertado en muchas ocasiones dando sus opiniones pero yo me centraré en los errores de interpretación que comete en éste en particular:

¿A dónde vamos a llegar, Pedro, cuando empezamos a criticar a gobernantes por dar facilidades a grandes empresas para instalarse en la comarca, históricamente desfavorecida, y cuando criticamos a los dirigentes por cometer el terrible pecado y falta de acierto al pretender mejorar nuestras comunicaciones que son el pilar fundamental del desarrollo?

Debería haber mejores argumentos para desechar la iniciativa de la parada del AVE que el simple hecho de que éste tardara cinco minutos más en llegar a su destino. Está clarísimo que si cada pueblo tuviese su propia estación convertiríamos el AVE, más que en “ARRE”, en un cercanías; pero cualquiera entiende que el AVE también para, beneficia -y mucho- a la zona donde lo hace, y que echando una mirada a 150 kilómetros de radio territorial todas las posibles paradas de éste serían un sin sentido excepto Valencia, Sagunto, Castellón y Segorbe. No entremos a valorar ya, los beneficios inmediatos que ésta aportaría tanto en la construcción, beneficio de visitas, comunicación y empleos de gestión de la misma. Vamos, es toda una oda al disparate, según Pedro, el mero hecho de proponerla y eso que es precisamente él quien, con su artículo, se proclama vocero solicitador de mejoras.

Como consejo podría yo aportar que lo mejor tras una crítica es exponer una idea mejor, pero como cualquiera puede ver -o leer- Pedro no propone ni una. Todo son deseos peregrinos, desacertados o fuera de lugar como la reivindicación de mejoras sociales para nuestros mayores que son precisamente, al menos en nuestra comarca, los que mejor están y los que ayudan a sus hijos o nietos en la ruina en la que los han metido los verdaderos ineptos que nos gobiernan desde Madrid. Entiendo que no habrá que evangelizar al gobierno local sino a la propia sociedad en el caso de que los mayores se vean desamparados.

Yo voy a proponer una medida así a bote pronto para beneficiar al comercio local: ¿por qué no cambia el gobierno central el favoritismo hacia los empresarios chinos que se han cargado cualquier competencia; que empezaron con las tiendas, ya van a por los bares y espérate; que no pagan impuestos generando una desleal competencia y que más que un beneficio han sido un agravio para todos? ¿Qué te parece Pedro?

Seamos serios hombre, criticar un PAI en concreto cuando han sido todos y cada uno de los pueblos los que lo han llevado a cabo por la necesidad y la bonanza del sector o solicitar mejoras en la educación, el empleo o las VPO cuando no son competencias locales… no ayuda y crea desconcierto. Pareces ZP con su aborto, ¿memoria? histórica, matrimonio gay, etc.

Podemos mejorar mucho, hacer las cosas mucho mejor. El éxito de esta misión consiste en ser objetivo y no ser sectario. Así y trabajando… no habrá manera posible de fracasar.

Saludos a todos y gracias por aguantarme. Volveré.

Fdo: Miguel Romualdo (Michel) de Altura