Como viene siendo habitual, anualmente en la localidad de Viver, multitud de eventos y actividades tendrán lugar estos días en el muncipio con motivo de las fiestas patronales en honor a San Roque, Desamparados, Asunción, San Miguel Arcangel yVirgen de Gracia, por otro lado, las fiestas taurinas, que tienen lugar entre los meses de Agosto y Septiembre.
Para ello, la comisión de fiestas de Viver se ha puesto “manos a la obra”, con el fin de obtener dinero suficiente para sufragar los gastos de dichos eventos, entre los que además destacan, discomóviles, verbenas y otros espectáculos. Así pues, pese a que Viver en periodo estival superará los cinco mil habitantes, no posee en su presupuesto de festejos, grandes gastos extraordinarios, no obstante el grupo de jóvenes responsables de los actos deben cobrar una cuota que muchos se niegan a pagar, haciéndose los remolones, según nos han confirmado miembros de la comisión, este recibo o cuota consiste en pagar 40 € los varones y 20 € los jubilados.
La Comisión de Viver, tan sólo pretende un año más, llevar a todos los rincones de la localidad, alegría y felicidad, sobre todo a mayores y niños, también jóvenes, por lo que este grupo de organizadores le dedicarán mucho tiempo y esfuerzo para el desarrollo de todas las actividades en estas fiestas patronales. Por ello, y para seguir la tradición, la Comisión de Fiestas ha pedido públicamente mayor implicación y colaboración a los habitantes del pueblo, pues las fiestas hay que pagarlas entre todos, afirman los mayorales de esta comisión.
Por este motivo, han advertido que quienes se nieguen a colaborar económicamente, no tendrán derecho al disfrute ni participación de las mismas (orquestas musicales, juegos, actividades infantiles o fiestas taurinas…). Todo esto es necesario ante la negativa ciudadana a pagar sus fiestas, según explica la comisión, asegurando haber padecido un caso insólito, cuando un varón llegó a entregar la cantidad de “20 céntimos y un kilo de arroz” como cuota a pagar, confirmando así la resistencia ciudadana generalizada al pago económico de las cuotas a abonar. En este sentido, cabe resaltar que los veraneantes “no pagan las fiestas”, abonando la entrada a cada espectáculo y es que, aunque las fiestas de Viver tengan “talante”, ni la administración central ni la autonómica costearán los gastos de estas entrañables fiestas viverenses.
Para ello, la comisión de fiestas de Viver se ha puesto “manos a la obra”, con el fin de obtener dinero suficiente para sufragar los gastos de dichos eventos, entre los que además destacan, discomóviles, verbenas y otros espectáculos. Así pues, pese a que Viver en periodo estival superará los cinco mil habitantes, no posee en su presupuesto de festejos, grandes gastos extraordinarios, no obstante el grupo de jóvenes responsables de los actos deben cobrar una cuota que muchos se niegan a pagar, haciéndose los remolones, según nos han confirmado miembros de la comisión, este recibo o cuota consiste en pagar 40 € los varones y 20 € los jubilados.
La Comisión de Viver, tan sólo pretende un año más, llevar a todos los rincones de la localidad, alegría y felicidad, sobre todo a mayores y niños, también jóvenes, por lo que este grupo de organizadores le dedicarán mucho tiempo y esfuerzo para el desarrollo de todas las actividades en estas fiestas patronales. Por ello, y para seguir la tradición, la Comisión de Fiestas ha pedido públicamente mayor implicación y colaboración a los habitantes del pueblo, pues las fiestas hay que pagarlas entre todos, afirman los mayorales de esta comisión.
Por este motivo, han advertido que quienes se nieguen a colaborar económicamente, no tendrán derecho al disfrute ni participación de las mismas (orquestas musicales, juegos, actividades infantiles o fiestas taurinas…). Todo esto es necesario ante la negativa ciudadana a pagar sus fiestas, según explica la comisión, asegurando haber padecido un caso insólito, cuando un varón llegó a entregar la cantidad de “20 céntimos y un kilo de arroz” como cuota a pagar, confirmando así la resistencia ciudadana generalizada al pago económico de las cuotas a abonar. En este sentido, cabe resaltar que los veraneantes “no pagan las fiestas”, abonando la entrada a cada espectáculo y es que, aunque las fiestas de Viver tengan “talante”, ni la administración central ni la autonómica costearán los gastos de estas entrañables fiestas viverenses.
Redacción/El Informal Segorbino
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